Los espejos son uno de los objetos más útiles y necesarios dentro de un baño, después de los elementos imprescindibles y necesarios (inodoro, pileta y ducha o bañera), claro.
Tienen la virtud de ampliar el espacio en el que se colocan, ganan visibilidad y aportan mayor cantidad de luz al baño reflejando una lámpara o ventana.
Los espejos redondos suavizan el aspecto visual del baño dándole mayor ligereza, ya que no cubren toda la pared.
Lo bueno de este tipo de espejos es que se adaptan a cualquier estilo decorativo, desde el más minimalista sin marco o con un marco fino metálico. Pasando por el estilo industrial donde se sujetan con cadenas o correas, hasta en estilos más clásicos con marcos de gran tamaño.
Lo bueno de colocar este tipo de espejo es que puede ser el complemento decorativo perfecto para darle un toque especial, al igual que combinar varios espejos de distintos tamaños en una misma pared.
Personalmente me gusta más la opción de espejo solitario... menos es más!
Son el complemento decorativo perfecto para cambiar el aspecto de un baño, rápido y sin complicaciones. Cambia el modelo, la forma o el estilo del espejo y solo con este detalle, el cambio en tu baño será notable. No les parece?
Si Dios quiere, en poco tiempo volveré a tener mi casa propia.
Mientras tanto, sigo buscando inspiración, guardando en mis carpetas de pinterest
y compartiendo con ustedes estas imágenes encantadoras.
Espero que disfruten mucho de las imágenes, se inspiren
y pongan en práctica cada nueva idea decorativa que les traigo al blog.
Buen martes para todos!
Nos vemos mañana con más y mejor!
Besotes.
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